Tom Ford otoño / invierno 2016.

Mientras la industria se sumerge en las vibras primaverales y veraniegas de las colecciones que se presentan en este momento en la semana de la moda en Nueva York, Tom Ford volvió a la ciudad como un rebelde visionario: presentando su colección para otoño-invierno 2016 en formato see-now-buy-now, la primera en su tipo. 

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Gigi Hadid caminando en la pasarela.

.....Cuando Tom Ford canceló su show donde presentaría su colección para otoño-invierno 2016 en febrero, nadie entendía que estaba pasando. ¿Se retiraría? ¿Estaba harto? ¿Tendríamos que comenzar a pensar una vida sin uno de los diseñadores más famosos, importantes y queridos de los últimos tiempos? La respuesta a todas estas preguntas era un obvio y rotundo no. 

El diseñador norteamericano quería optar por otra dirección; ¿cuál? la de revolucionar la moda. Así de sencillo. Así de soberbio. Tom Ford decidió optar por el ahora famoso formato see-now-buy-now, algo que solo los grandes diseñadores pueden darse el lujo de hacer (y que lo están haciendo actualmente, esta temporada también lo harán Tommy Hilfiger y Burberry): reducir la brecha entre el momento en que el cliente ve la colección y el momento en que él o ella la compran, un concepto basado en la inmediatez, utilizando las palabras de Vogue. 

.....El desfile se llevó a cabo en medio de una cena en el restaurante del hotel Four Seasons tal y como Tom Ford lo quería (según la entrevista que dio a Nicole Phelps de Vogue antes del show): algo "íntimo" y alejado de las características de un show regular, aunque siguió teniendo en sus invitados a amigos y musas como Naomi Campbell, Julianne Moore, Zayn Malik o Alicia Keys. 

Pero, además del contexto y las condiciones bajo las que fue presentada, en realidad esta colección fue como cualquier otra, no tuvo nada verdaderamente especial o que no hayamos visto antes ni de parte de los diseños para hombre ni de parte de los diseños para mujeres. La colección estuvo repleta de todos los elementos que hacen a Tom Ford ser Tom Ford desde sus tiempos en Gucci durante los años noventa. 

.....El primer look nos resumía casi todo lo que veríamos. Grace Hartzel abrió el show con un peinado à la Ziggy Stardust con una blusa que será el terror de PETA: de piel pintada y manga larga sobre la cual llevaba un par de cinturones de piel que daban una primera impresión de ser arneses, combinada con una falda lápiz de tweed, botas (también de piel) y accesorios oversized


Así que sí, hubo piel por doquier, en faldas, blusas, pantalones, bolsos, cinturones y botas. Hubo fur coats largos y cortos, más accesorios oversize y el gran regreso del leopard print en gabardinas, faldas, en un vestido y en una blusa. 

El terciopelo también tuvo su momento en vestidos largos y gabardinas para los hombres. Casi todos los hombres, por cierto, llevaban suéteres de cuello alto debajo de sacos estampados e incluso una puffer jacket larga tuvo una aparición (es tendencia para el otoño-invierno 2016, después de todo, y ni Tom Ford se pudo resistir). 

La última parte de la colección estuvo repleta de eso que Tom Ford hace excelente: piezas con lentejuelas bordadas y plumas, además de un exquisito traje para hombre en color marfil. 




.....Una colección ¿bella? sí, ¿memorable? probablemente no; o sí, ya que a estas alturas puede que muchas personas ya tengan una de estas piezas en su closet, listas para ser utilizadas; ¿envidia? mucha. 


E N T R A D A S P O P U L A R E S